Crítica - Señora Influencer: una irregular pero sorpresiva y oscura comedia mexicana

El marketing, en ocasiones, suele sere el peor enemigo para una película. ¿Cuántas veces no hemos visto avances que presentan de forma tergiversada la trama y el tono de para llamar la atención de un sector específico del público? Señora Influencer (2023) es, sin duda, uno de los casos más recientes y notables. ¿Cuántos no terminaron hartos y convencidos de que no la verían con el insufrible tráiler que Cinépolis mostró durante varias semanas en sus salas? Pero lo que parecía la típica comedia simplona al estilo Mirreyes vs. Godínez (2019) es un poco más que eso, pues lo que alberga una parte importante es un thriller por momentos oscuro acerca de la forma en que las redes sociales impactan en la salud mental y el criterio de las personas, sobre todo en aquellas que dedican su vida a ellas. 

Señora Influencer critica
Imagen: Sastre Films

Carlos Santos (Chilangolandia) dirige la que bien podría ser una de las cintas más esquizofrénicas del año. Sí, las imágenes inaguantables que hemos visto en los avances aparecen en la trama tal y como se esperaba; sin embargo, lo que no muestran es la parte más densa de la historia, en la que Santos también guionista desarrolla una sátira filosa y hasta oscura sobre el mundo de los influencers, aquellos individuos que habitan las redes sociales y que llegan a ser tan amados como odiados. El filme, por supuesto, aborda esta cuestión con algo que sale de los estándares del cine comercial nacional, y aunque no siempre resulta efectivo o totalmente disruptivo, sí que demuestra una intención de querer hacer las cosas distintas.

Señora Influencer nos pone en los zapatos de Fati (Mónica Huarte), una mujer madura que actúa como niña y que, influenciada por una gurú de la autoayuda, se libera de las cadenas de su padre para vivir su propia vida. La película, ciertamente, tarda bastante en empezar, estableciendo un tono casi solemne durante todas las escenas en las que la protagonista actúa con su terapeuta (Bárbara Lombardo). Pero en cuanto Fati encuentra un celular y abre su cuenta de Instagram, la cinta se vuelca a la comedia, y Huarte se desenvuelve por completo al interpretar a una mujer auténtica que no teme hacer el ridículo. La liberación femenina, entonces, se convierte en la primera temática que toca la narrativa, pero nada prepara al espectador para lo que viene a continuación.

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Imagen: Sastre Films

Cuando Camila (Diana Carreiro) y Sofi (Macarena García Romero) entran a escena, la comedia física lentamente va transformándose en una sátira sobre el medio influencer. Santos introduce a la protagonista en un entorno hostil, prefabricado y tóxico que da como resultado varios momentos de pesadilla, representados aquí de una forma onírica atípica para este tipo de proyectos. Y luego, las cosas toman un giro violento cuando el tema del ciberbullying se apodera de la trama. Pero eso no es todo, pues el thriller que se gesta durante unos minutos al final se convierte en una especie de slasher. Sí, estos cambios hacen que la cinta sea irregular, pero si hay algo que aplaudirle es su impredecibilidad.

De cualquier manera, el filme comete algunos de los pecados de la comedia comercial mexicana. Todos los personajes, fuera de Fati, rayan en lo caricaturesco, ya que no son más que accesorios, y tampoco tienen un desarrollo como tal. Señora Influencer también transita por los mismos lugares que la mayoría de las producciones que tratan de atacar una problemática contemporánea con supuesto humor. Y, por otro lado, está la caracterización de Huarte, que resulta extraña e incómoda. No es hasta ya avanzada la historia que más o menos se da a entender por qué habla y actúa así, lo que, al principio, deja dudas sobre sus motivaciones y su condición. 

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Imagen: Sastre Films

La película recuerda a Sweat (2020), que presenta, igualmente, la rutina de una influencer joven, en este caso y lo que ocurre en su día a día cuando las cámaras se apagan. Si bien su acercamiento es más dramático, ambas comparten diversos puntos en común, principalmente la manera en que la fama y un estilo de vida basado completamente en la aprobación de extraños afecta la estabilidad emocional y mental de una mujer. Con una propuesta fresca, inesperada y entretenida, Señora Influencer intenta poner en el foco varios de los males digitales que aquejan a la sociedad a causa de las redes sociales. No siempre lo logra, pero cuando lo hace, ofrece una de las experiencias más singulares que el cine comercial mexicano ha creado en los últimos tiempos.

Señora Influencer está actualmente en cartelera.

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