Reseña - La Crónica Francesa: la muerte del periodismo

El periodismo ha muerto, o al menos eso es lo que Wes Anderson y muchos más creen. Y la verdad es que costaría trabajo contrariarlo. Títulos anzuelo, artículos diseñados para generar clics, notas sobre qué comió tal celebridad o qué calzones se puso para tal fiesta... El arte de investigar y generar contenido relevante, por supuesto, todavía existe, pero ante la falta de recursos, mucho ha quedado bloqueado por un paywall. Y entonces, ¿cuál es el futuro de la información? Al director estadounidense parece no importarle ya lo que viene para el periodismo que, de cualquier manera, parece ya estar condenado, pero sí el pasado, que es el objeto de su más reciente película. En La Crónica Francesa (The French Dispatch, 2021), Anderson rinde un homenaje a la verdadera esencia de esta profesión, que adquiere una dimensión mayor cuando toma un enfoque de autor.

La Crónica Francesa reseña
Imagen: American Empirical Pictures, Indian Paintbrush, Studio Babelsberg, Searchlight Pictures

The French Dispatch of the Liberty, Kansas Evening Sun es un diario estadounidense afincado en el pueblo de Ennui-sur-Blasé, Francia, y conformado por un grupo de comprometidos periodistas expatriados. Cuando Arthur Howitzer Jr. (Bill Murray), el editor, muere, su testamento obliga a suspender la circulación del diario, no sin antes publicar un número final. Así, los empleados ponen manos a la obra para lanzarlo con tres de sus artículos más importantes, cada uno con singulares historias de los personajes más excéntricos que habitan o habitaban la decadente ciudad. 

Wes Anderson ha hecho la película más wesandersoniana posible. La Crónica Francesa, como era de esperarse, es un festín visual y justo lo que cualquier fan suyo esperaba. Con una estructura que parece inspirada en un cómic o, por supuesto, una revista, la cinta se presenta como una antología conformada por los tres relatos que compondrán el último número del diario. Esto le da a Wes Anderson y a Roman Coppola, Hugo Guinness y Jason Schwartzman (quienes lo ayudaron a idear la historia) la oportunidad de explorar cualquier cantidad de recursos visuales y narrativos, que al final se pueden apreciar como un collage lleno de detalles. Así, son necesarios hasta dos o tres pares de ojos más para poder apreciarlos todos.

Pero más allá de la oferta visual de Anderson y el espectacular diseño de producción, el filme explora un concepto muy interesante que se acopla muy bien al estilo del cineasta: el periodismo gonzo. Popularizado por Hunter S. Thompson, este género convierte al reportero en parte de la noticia, o incluso en el objeto de esta. Terry Gilliam llevó la temática al cine con su alucinante Miedo y Pánico en Las Vegas (Fear and Loathing in Las Vegas, 1998), que, curiosamente, también es protagonizada por Benicio del Toro, quien tiene aquí una casi muda pero brillante participación. Anderson y sus amigos conciben la película como una pieza de periodismo gonzo que destapa los aspectos más vanguardistas y experimentales de esta ocupación.

La Crónica Francesa reseña
Imagen: American Empirical Pictures, Indian Paintbrush, Studio Babelsberg, Searchlight Pictures

Cada una de las historias ve a sus reporteros estrella involucrarse con algunas de las personalidades de Ennui-sur-Blasé. En la primera, por ejemplo, J. K. L. Berensen (una siempre puntual Tilda Swinton con un divertido acento) cuenta el relato de cómo logró hacer su pieza de Moses Rosenthaler (del Toro), un genio artístico encerrado en prisión por atroces crímenes. En ella, Berensen se vuelve parte de la noticia hacia el final, influenciando las acciones de su objeto de estudio. Así, no queda duda de que, para Anderson, el periodismo gonzo podría ser la única alternativa para mantener viva una profesión que se ha desvirtuado por completo

Y claro, cada uno de los capítulos que integran La Crónica Francesa contienen ciertas posturas sobre el arte, envueltas, eso sí, dentro de la típica comedia de Anderson y toda su tropa. En la segunda historia nos topamos con Zeffirelli (Timothée Chalamet demostrando que es uno de los actores más cotizados de la actualidad), un líder estudiantil con problemas para poner sobre papel sus ideas revolucionarias, y que al final lo consigue, aunque no la de forma esperada, pues sus frases e imagen comienzan a aparecer en toda clase de objetos de mercancía. En la primera también vemos algo de eso, cuando Julien Cadazio (Adrien Brody) le dice a Rosenthaler que un artista no debe tener otro objetivo más que vender su trabajo. La crítica parece irónica, dado que estamos viendo una obra artística por la que tuvimos que pagar, pero ahí es donde se pone en funcionamiento la faceta más satírica de la cinta.

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Imagen: American Empirical Pictures, Indian Paintbrush, Studio Babelsberg, Searchlight Pictures

Pero hay algo que va en detrimento de lo nuevo de Wes Anderson. Concibiendo una película totalmente como se esperaba, el cineasta dejo poco o casi nada de espacio para las sorpresas. Sí, por ahí vemos una secuencia animada que permite sobrepasar los límites impuestos por la producción misma, pero fuera de eso no hay otro riesgo aparente. Los efectos prácticos son vistosos e ingeniosos; los sets son una obra de arte; los vestuarios son excepcionales... Sin embargo, las historias no generan tanto impacto por sí solas. La última, por ejemplo, protagonizada por Jeffrey Wright que incorpora ciertos aspectos de la personalidad del escritor James Baldwin en su personaje es poco atractiva, por más que la actuación de este último sea sumamente convincente. 

De cualquier manera, La Crónica Francesa es otro importante esfuerzo por parte de Anderson, quien construye su obra como una pieza hipertextual con decenas de referencias para aficionados del cine, la música y la literatura, algo que tipos como Lars von Trier también hacen a la perfección. Y aunque estar al tanto de todo ello puede ser abrumador, la película sale adelante gracias a su ingeniosa estructura y por su sentido homenaje a un arte que, aunque muerto, puede revivir algún día, cuando las nuevas generaciones vuelvan a ser parte de la noticia.

La Crónica Francesa se encuentra actualmente en cartelera.

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