Su primera representación cinematográfica fue uno de los sucesos fílmicos más impresionantes de toda la década pasada, teníamos ante nosotros una de las cintas de superhéroes más espectaculares de todos los tiempos hasta ese momento. La trilogía batió gran cantidad de récords y aunque el capítulo final dejó con un mal sabor de boca a la mayoría, esta abrió todo un abanico de posibilidades para las propiedades de Marvel y de otras casas de cómics.
El reboot vino más temprano de lo esperado. Desde otro punto de vista, el sorprendente Hombre Araña regresó una vez más a la pantalla con una intención completamente distinta, pero con la misma esencia del personaje que todos amamos.
La primera parte de esta nueva trilogía trajo nuevas cosas a la mesa, pero también se olvidó de algunas o abusó de otras más que afectaron notablemente toda su ejecución. Ahora, con la segunda parte, Marc Webb (500 Días con Ella), una de las mentes maestras de todo este proyecto, nos trae de vuelta a un Hombre Araña metido una vez más en problemas tanto en su faceta como superhéroe como en la de Peter Parker. ¿Enmendaron Webb y su equipo todos los errores de su trabajo anterior? ¿Volvieron a darle al Hombre Araña el lugar que se merece? Es difícil tratar de responder, veamos por qué.
Después de la promesa que le hizo al moribundo Capitán Stacy de mantener al margen a su hija, Gwen (Emma Stone), Peter Parker (Andrew Garfield) trata ahora de mantener el equilibrio en su vida protegiendo a Nueva York de los criminales como el Hombre Araña y siguiendo su día a día como alguien normal y todo lo que esto implica. Sin embargo, el remordimiento que le causa seguir con Gwen y no cumplir con su promesa lo han puesto en un predicamento, el cual lo orillará a cambiar la dinámica de su relación con la mujer que más ama. Por si fuera poco, el regreso de su mejor amigo, Harry Osborn (Dane DeHaan) y el surgimiento de un nuevo enemigo que se hace llamar Electro (Jamie Foxx), cambiarán su vida por completo.
La nueva aventura del Hombre Araña en el cine llega tanto con grandes aciertos como con cosas totalmente desafortunadas. Empecemos por lo bueno. El equilibrio que se logra entre Peter Parker y el Hombre Araña parece ser el correcto. Los sucesos que impactan de una u otra manera a cada una de sus identidades afectan invariablemente a la otra, dejando ver su fragilidad como persona y al mismo tiempo su valentía como superhéroe. El sentido del humor está ahí, sus escenas de acción también y no se diga la personalidad. No cabe duda que por primera vez vemos a un Hombre Araña auténtico.
Emma Stone logra el hecho de que no nos podamos imaginar a otra actriz como Gwen Stacy. Los guionistas han acertado al no caracterizarla pasivamente y subordinada a todas las acciones de Parker. Sus decisiones mueven la historia hacia adelante y la presentan como un personaje secundario realmente importante. Si bien la representación de su relación amorosa puede parecer en pantalla como un cliché más, esta se mantiene discreta, con varios tintes humorísticas y realmente imprescindible para toda la narrativa.
La inclusión de Harry Osborn es claramente la parte más interesante de toda la cinta. Finalmente, la condición y la locura de la familia Osborn quedan esclarecidas no solo con la aparición de Norman (Chris Cooper), sino con la actuación de DeHaan, quien logra encarnar a un atormentado, obsesionado y claramente perturbado Harry. A diferencia de James Franco, quien interpretó al mismo personaje en la trilogía original, DeHaan logra hacernos ver el lado psicótico de Harry, aquel que someterá a Peter Parker a la prueba más grande que haya enfrentado hasta el momento. Su gran caracterización es de lo mejor.
Sony tiene planeado hacer también un pequeño universo alrededor del Hombre Araña. Con dos secuelas más ya anunciadas y con el proyecto de Venom y Sinister Six en desarrollo, la productora tratará de emular el éxito del Universo Cinemático de los Estudios Marvel. El Sorprendente Hombre Araña sin duda se percibe como la puerta de entrada; todas las referencias, la breve pero acertada aparición de personajes como Rhino (Paul Giamatti), Alistair Smythe (B. J. Novak) y Felicia Hardy (Felicity Jones), y la todavía enigmática presencia del ¿Caballero? nos hace soñar con un proyecto que, llevado de la mejor forma, podría ser increíble.
SPOILERS ADELANTE. La secuencia de la batalla entre el Hombre Araña y el Duende Verde y el subsecuente fatídico desenlace de Gwen Stacy resulta sumamente impactante. Orquestadas estupendamente, las escenas llevan la tensión al máximo logrando recrear uno de los momentos más importantes en toda la historia del Hombre Araña. Era un misterio si el personaje de Gwen vería su final en esta película y aunque había muchas pistas que lo sugerían, su muerte resulta igual de impactante y sorpresiva. El gran trabajo de edición sobre todo es la principal razón de este logro. TERMINAN SPOILERS.
¿Y lo malo? Nuevamente, la representación de los villanos queda muy por debajo de lo esperado. No se trata de Rhino ni del personaje mencionado anteriormente, sino del mismo Electro, quien se suponía sería el principal adversario del protagonista en esta ocasión. Patético, ridículo y poco memorable ha resultado Foxx como el antagonista.
Igual de irrisorias resultan varias escenas que tratan de aumentar la tensión sin sentido alguna. Me refiero específicamente al momento de los aviones, sabrán de lo que hablo cuando la vean.
La historia de los padres de Parker ha comenzado a ser molesta. ¿Era necesario abrir la cinta para conocer qué pasó con ellos? Resta por ver si las acciones de Richard Parker todavía tendrán más repercusión en las siguientes películas, pero uno esperaría que los guionistas dejen atrás todo esto, cierren el círculo y alejen a nuestro héroe de esta enfermiza obsesión.
Si bien no son tantas las cosas que podrían pasar como desaciertos en toda la película, los ya mencionados son suficientes como para darle un duro golpe a todo la experiencia en general, uno que no la deja sobresalir ni brillar. Por suerte, este no ha sido devastador, y el desenlace nos deja realmente clamando por más.
¿Podrá lograr Sony su sueño de crear este universo que tienen en mente? Ojalá que sí. Esperemos que el tercer episodio de esta saga le haga justicia a todo lo que significa el Hombre Araña, tanto él como sus fanáticos se lo merecen.
SPOILERS ADELANTE. La secuencia de la batalla entre el Hombre Araña y el Duende Verde y el subsecuente fatídico desenlace de Gwen Stacy resulta sumamente impactante. Orquestadas estupendamente, las escenas llevan la tensión al máximo logrando recrear uno de los momentos más importantes en toda la historia del Hombre Araña. Era un misterio si el personaje de Gwen vería su final en esta película y aunque había muchas pistas que lo sugerían, su muerte resulta igual de impactante y sorpresiva. El gran trabajo de edición sobre todo es la principal razón de este logro. TERMINAN SPOILERS.
¿Y lo malo? Nuevamente, la representación de los villanos queda muy por debajo de lo esperado. No se trata de Rhino ni del personaje mencionado anteriormente, sino del mismo Electro, quien se suponía sería el principal adversario del protagonista en esta ocasión. Patético, ridículo y poco memorable ha resultado Foxx como el antagonista.
Igual de irrisorias resultan varias escenas que tratan de aumentar la tensión sin sentido alguna. Me refiero específicamente al momento de los aviones, sabrán de lo que hablo cuando la vean.
La historia de los padres de Parker ha comenzado a ser molesta. ¿Era necesario abrir la cinta para conocer qué pasó con ellos? Resta por ver si las acciones de Richard Parker todavía tendrán más repercusión en las siguientes películas, pero uno esperaría que los guionistas dejen atrás todo esto, cierren el círculo y alejen a nuestro héroe de esta enfermiza obsesión.
Si bien no son tantas las cosas que podrían pasar como desaciertos en toda la película, los ya mencionados son suficientes como para darle un duro golpe a todo la experiencia en general, uno que no la deja sobresalir ni brillar. Por suerte, este no ha sido devastador, y el desenlace nos deja realmente clamando por más.
¿Podrá lograr Sony su sueño de crear este universo que tienen en mente? Ojalá que sí. Esperemos que el tercer episodio de esta saga le haga justicia a todo lo que significa el Hombre Araña, tanto él como sus fanáticos se lo merecen.
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