Muse @ Palacio de Deportes, Madrid 2012

Después de la polarización que surgió hace unas semanas por The 2nd Law, Muse se embarca en una nueva gira mundial, la cual, aseguran será la más desquiciada que hayan montado jamás.
Con paradas en algunas ciudades europeas en lo que resta del año, para luego visitar Japón y Norteamérica (y posiblemente México) en el primer cuarto del año entrante, la banda se presentó ayer en Madrid en una de las primeras fechas de este nuevo tour.

Antes de hablar de lleno de lo que ocurrió ayer, sería bueno recordar qué es lo que ha hecho Muse en sus giras pasadas, esto con el propósito de darle un contexto a lo que podríamos llamar desquiciante en este nuevo show del trío inglés.
Anteriormente, las habilidades musicales de la banda siempre estuvieron por encima de los recursos teatrales. En la era de su álbum Origin Of Symmetry, los visuales eran escasos y salvo en momentos, como cuando tocaban "Bliss", la banda recurría a elementos externos como lanzar grandes globos llenos de confeti que realmente enloquecían al público y a ellos mismos, tal y como podemos constatar en la energética rendición grabada en el Hullabaloo. Muse se sostenía por sí misma demostrando una actitud sumamente despreocupada y llena de energía. Los años siguientes, incluyendo la era del Absolution, vieron a la banda seguir en esta misma línea demostrando que estaban destinados a un lugar entre los grandes del rock contemporáneo, tal y como quedó constatado nuevamente en su acto de 2004 en Glastonbury.

Con Black Hole & Revelations, que para algunos significa la divergencia real de la banda, Muse tomó un camino distinto al comenzar a "conceptualizar" sus shows e inyectarlos de fascinantes visuales, gigantes antenas en el escenario, toda clase de luces y hasta instrumentos tan llamativos como casi ridículos. Durante su magno evento en Wembley en 2007, Muse demostró que era posible demostrar un real equilibrio entre su música, una discreta teatralidad y aspectos extra que añadieran ese toque épico a sus conciertos. 

Unos años después, con The Resistance, Muse llevó un poco más allá sus aspiraciones conceptuales y mandaron construir tres plataformas cubiertas de pantallas en donde cada uno de los integrantes estaría tocando por algunos lapsos del show (ver aquí). Si bien este pequeño espacio no los dejaba moverse libremente, los movimientos de las torres, grandes visuales y el excelente repertorio que se armó para el show sirvió nuevamente para demostrar la calidad de la banda. Momentos como "Overture", primera parte de su sinfonía "Exogenesis", eran un ejemplo de reivindicación musical. En esta misma gira, pero ya en formato de estadios, Muse comenzó a aspirar a cosas aun más grandes y llamativas al montar una tipo nave nodriza donde ellos estarían tocando y en momentos, un bailarín aéreo saldría por arriba del público para interpretar una coreografía durante "Blackout".

Ahora, el trío de Devon regresa con un nuevo concepto, algo más personal según han declarado, pero con la misma pretensión de ir a lo grande. La pregunta es: ¿Se les ha salido finalmente de las manos? Veamos.

El concierto


Después de una muy buena presentación de The Joy Formidable, que gozaron de un gran recibimiento y que se les vio realmente entregando todo con temas como "Cholla", el público español estaba listo abarrotando todo el Palacio de Deportes con un ambiente inmejorable. Como dato curioso, toda la audiencia cantó feliz cumpleaños al baterista de la banda galesa a petición de Ritzy Bryan, la vocalista.

Y así, finalmente, las luces se esfumaron una vez más poco después de la hora pactada para dejar sonar la pista de "The 2nd Law: Unsustainable" y se comenzará a recrear el trailer que vimos hace unos meses anunciando la llegada del álbum, esto sólo con las luces y pantallas ya dispuestas al inferior y al fondo del escenario. Mientras fulgurantes luces rojas nos daban un creativo esbozo del desquiciado robot del trailer, Bellamy, Wolstenhome y Howard salieron ante la euforía de cerca de 16 mil seguidores que aguardaban ya los acordes chirriantes de la guitarra de Bellamy. Sin ninguna presentación, el dotado guitarrista comenzó con su anti-dupstep maravillando a propios y extraños. La reacción es mixta. Por un lado, ¿por qué no traer una sección de cuerdas? Si hay varios temas que las utilizan, no haría daño gastar un poco más de dinero en entregar un rendición en vivo total de este tema. Por el otro, "Unsustainable" suena muy bien en vivo mientras Bellamy toca. Sea dubstep o no, discusión que no viene al caso en este momento, el tema sirve de un excelente preámbulo al show que está por venir.

Inmediatamente, viene uno de los momentos más espectaculares del concierto. "Supremacy", uno de los dos temas que podría catalogar como lo mejor de su nuevo álbum, irrumpe con la conjunción exacta de la batería y guitarra. El riff del inicio fulmina de manera inmediata y deja claro la frescura en la que Bellamy se mantiene todavía. Con el impresionante juego de luces, un extasiante solo y un final épico lleno de emoción, Muse entregó una de los mejores interpretaciones de la noche al principio de la misma. Nuevamente, critico el hecho de la ausencia de cuerdas pero qué se le puede hacer. Se le perdona al ver a todos entonando: "...Suuuuupremacy".


Aprovechando el hilo conductor y después del interludio que interpretan Bellamy y Wolstenhome, "Hysteria" vino a reventar la cabeza de todos con, a mi juicio, el mejor momento de la noche. Así es, este clásico tema se convirtió en lo más grato de la velada al ver a un Matthew feliz en el escenario y entregando un solo electrizante que nos recuerda épocas que difícilmente volverán en todo su esplendor. Con Wolstenhome expuesto al frente del escenario tocando esas memorables notas de su bajo justo al principio del tema, bien podría decir que este tema se llevó la noche.

"Suppermassive Black Hole" vio finalmente a la famosa pirámide invertida caer poco a poco por encima de los integrantes. Conformada por pantallas en sus paredes y acomodándose de manera distinta durante cada uno de los temas, ésta sin duda llama la atención en sobremanera y hasta cierto punto, termina por opacar a la banda. Hablaremos de ello más adelante. Regresando al tema, fue interesante ver cómo Bellamy regresó al riff original del tema, que si han prestado atención, ha cambiado alrededor de los años durante las distintas épocas de la banda. Lo que se ha transformado sustancialmente es el solo; en esta ocasión, nos topamos con una rendición en donde las notas se suceden una a otra de manera natural pero con ese sonido tan electrónico que saca Bellamy de su guitarra. Personalmente, prefiero aquella versión de Wembley de 2007.

"Resistance" nos mostró la destreza de Howard en la batería mientras las notas de piano que Morgan Nicholls ejecutaba daban paso a que Bellamy cantara una buena rendición del tema que aun así se siente un poco forzada en el set.

Con "Panic Station", el concierto entró en un momento de semi letargo que si bien no fue por culpa de la banda, sí hubo momentos que me parece desconcertaron a la banda. Para este tema, los visuales nos enseñan a un hipopótamo morado con zapatos bailando al ritmo de la canción (¿?). Las líneas de Bellamy suenan igual de increíble que en su versión de estudio pero la ausencia de la sección de vientos nuevamente nos hace sentir que le hace falta algo, en fin. Cerca del final del tema, Bellamy sufrió una discreta caída al subir un escalón. Muy poca gente se percató ya que este logró reincorporarse de manera inmediata para terminar el tema. Cabe destacar que la canción no causó gran impacto entre el público a comparación de los temas iniciales.



"Animals", otro de los dos grandes temas el nuevo álbum, también resultó de lo mejor del show a pesar del frío recibimiento del público. Sin embargo, la interpretación no fue perfecta debido un error cometido por Bellamy y es que al principio no cantó las primeras palabras del tema entrando casi hasta la segunda línea de este. Afortunadamente, Matthew se redimió con un espectacular solo y un final rimbombante y sencillamente genial. Para los visuales, nos topamos con las pantallas llenas de acciones de bolsa ficticias y un empresario siendo perseguido por una fuerza invisible. Gran momento sin duda.


Como es costumbre, Muse siempre nos regala uno o dos jams que llaman con el nombre de la ciudad en donde los tocaron primero, en este caso, Montpellier, y el cual ha sido llamado popularmente como "Monty Jam". En este momento, nos encontramos a Chris y Dom tocando a la par algo un poco suave para luego ser acompañados por algunas notas de Bellamy en el piano, siendo este una de los poquísima veces en las que lo vemos en este instrumento durante el show.

"Explorers" fue un buen momento de Bellamy exclusivamente en este instrumento y aunque la respuesta del público fue vaga, la interpretación fue muy buena y quizá, estaría dispuesto a nominarlo como el momento emotivo de la noche.

Quedándose en ese sitio, Bellamy anunció el siguiente tema como uno de su primer álbum y que no estaba del todo seguro de haberlo tocado en España alguna vez. "Falling Down" resultó no ser conocido por gran parte del público. Algunos se morían mientras escuchaban esta versión de piano y muchos otros se volteaban para platicar o aprovechaban para sentarse un momento. Con las hojas muertas del otoño cayendo como los visuales en las pantllas, Bellamy hizo un buen trabajo que a pesar de lo esperado para los fanáticos no resultó tan emotivo como se pudiera pensar.


Después, otra pieza que sorprendió por su inclusión hace unos días en Montpellier, apareció nuevamente para seguramente quedarse en el set de la banda en al menos esta parte de la gira. Me refiero a "Host", un viejo lado B de la banda, o al menos la mitad de el ya que después de unas notas de la guitarra de Bellamy.

Un fan favorite se hace sentir de manera inmediata. "Time Is Running Out" levantó los ánimos a todos del pequeño letargo y la energía se volvió a sentir en todo el ambiente del Palacio. Es un lástima que los mismos temas de siempre sean los únicos que logran esa respuesta de la gente. Lo sé, algunos me criticarán, pero es necesario seguir adelante con la evolución de la banda. Si bien su último álbum no es lo mejor del mundo, sí tiene grandes momentos que valen la pena destacar en un concierto de esta magnitud y que a veces, el público, no aprecia del todo o termina por irse con la finta.

"Liquid State" es uno de los momentos a los que clasificaría como incómodos en The 2nd Law, tal y como pueden leer en mi pasada reseña del álbum. Los riffs de Bellamy son espectaculares, pero ver a Chris cantando tieso en el escenario realmente nos deja con muchas dudas. Incluso vemos cómo Matthew recorre toda la parte posterior de este en un intento por llamar la atención y tratar de atenuar lo extraño del asunto. Creo que este tema no debería de estar considerado para el set de esta gira.

"Madness" fue recibida cálidamente, pero parece que podría tener una mejor posición; quizá entre temas un poco menos pasados. En cuanto a los visuales, el lyric video que vimos hace unos meses es lo que se encarga de llenar las pantallas en este momento. Por momentos, el keytar de Chris era opacado por la voz de Matthew y la batería de Dom. Aun así, la banda salió avante después del sólo del vocalista y el gran cierre que la banda hizo del tema.

Si mi memoria no me falla, "Follow Me" y "Undisclosed Desires" deben ser momentos inéditos en la historia de las giras de Muse, ya que por primera vez, vemos a Matthew sin instrumento alguno y dedicándose exclusivamente a cantar, hecho que me deja un poco de dudas nuevamente. Es como si la banda hubiera decidido darle más tareas a Nichols de secuencias para dejar que Bellamy se mueva libremente por el escenario haciendo todo tipo de movimientos y hasta tirarse al piso a cantar. La segunda parece que se convertirá en nuevo fan favorite ya que recibió una gran ovación del público.

Aunque hace poco más de un año, Bellamy y compañía parecieron haber declarado que sería muy difícil que algún tema del Origin Of Symmetry fuera interpretado de nuevo en el corto plazo, la banda no fue tan en serio ya que un trío de ellos ha estado apareciendo nuevamente. En esta ocasión "Plug In Baby" deleitó nuestros sentidos siendo también uno de los mejores momentos de la noche con ese gran inicio de Bellamy en donde saca los notas más agudas de su guitarra. Con una excelente rendición, la noche llegaba poco a poco a su fin.


Antes del siguiente tema, un video se proyecta en todas las pantallas y todos se comienzan a dar cuenta que se trata de una ruleta girando con dos únicas posibilidades: "Newborn" o "Stockholm Syndrome". El día de ayer, a Madrid le tocó la primera, hecho que realmente no hubiera querido que pasara. ¿Qué es este gran tema si no vemos a Matthew Bellamy tocar las primeras notas de piano del mismo? Nueva y sorpresivamente, Matt aparece hasta que llegan sus líneas solo preparándose para el gran riff de la canción, cosa que sigue siendo exquisita y espectacular. De cualquier modo, la espinita queda clavada. Mientras el grupo acaba el tema, la pirámide baja hasta quedar en posición normal y termina por cubrir a la banda por completo, finalizando así el set principal de la noche, dejándonos sólo con proyecciones televisivas de todo tipo de sucesos que parecen ser la base de la civilización capitalista moderna.

Unos minutos después, la pista de "The 2nd Law: Isolated System" suena íntegra mostrándonos el clip entero que ha servido para promocionar el tema en la red, un momento aburrido a decir verdad. Al terminar el tema, Matt y Chris aparecen de nuevo al ritmo del bajo del segundo interpretando "Uprising", tema que suena muy bien en esta posición del set, generando también gran respuesta y dejándonos escuchar el outro extendido que termina por poner la cereza en el pastel. Los visuales desconciertan nuevamente durante este tema. Mientras estos dos tocan, la pirámide sigue cubriendo a Dom y mientras esta poco a poco va subiendo, nos damos cuenta que en las pantallas corre un video clip de este haciendo Kung Fu golpeando a una gran cantidad de individuos. (¿?)

Un final anticipado viene con la ya clásica interpretación de "Knights of Cydonia", con ese gran tenebroso intro de "Man With An Harmonica" y con la máxima entrega del banda como siempre. Si bien no hay nada extraordinario qué comentar. Este tema sigue y seguirá siendo uno de los momentos donde el foro en donde se esté llevando a cabo el evento vibre y se cimbre con todos coreando a la par de Bellamy y elevando su puño en todo lo alto.



La banda deja momentáneamente el escenario para volver unos minutos después ante la aclamación de todos los presentes. Con "Starlight", el ultimo fan favorite de la noche, el público estalló en felicidad al escuchar uno de sus temas preferidos.

"Survival" fue el tema que cerró la noche y es aquí donde finalmente vemos a Matthew haciendo lo que nos gusta que haga, tocando el piano y la guitarra en la misma canción. Con un espectacular demostración de su habilidad con el instrumento, el show terminó con una ola de aplausos y un gran ovación del público.

¿Cuál es mi mayor problema con este show? Creo que Muse se ha diluido en sí misma con este concepto que intentaron crear. No me malentiendan, el show tiene grandes momentos, pero otros no son aprovechados de manera adecuada y unos más simplemente deberían de omitirse. No pido un set exclusivo de sus álbumes legendarios, pero ¿por qué no traer de vuelta grandes temas recientes como "Unnatural Selection", "MK Ultra" o  incluso "Invincible"

A fin de cuentas, se aprecia el esfuerzo de la banda por tratar de sorprender a sus fanáticos, pero quizá deberían de darse cuenta que a veces esto radica nada más y nada menos que en hacer lo que mejor sabes; así, no habrá falla. Emitan ustedes su propia opinión cuando tengan la oportunidad de ver el show.

Comentarios

  1. me parecio muy interesante y acertada tu reseña... pero Supermassive BlackHole no es del The Resistance y en una parte pones que "la bateria de Chris" cuando es en realidad Dom, saludos!

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  2. gracias por la corrección, no me había dado cuenta que lo puse así.

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