Después de las bazofias que Joel Schumacher dejó años atrás con sus exuberantes interpretaciones, Nolan. su hermano Jonathan y compañía se dieron a la tarea de reimaginar al encapotado, sin duda nada podría haber sido peor que las dos cintas anteriores, sin embargo, el escepticismo rondaba fuertemente a todo el proyecto.
En 2005 vino "Batman Inicia", la primera cinta de lo que más tarde se convertiría en una trilogía multimillonaria y sumamente aclamada por críticos y fanáticos por igual. La inclusión Christian Bale como nuestro héroe y la trama girando alrededor de Ra's al Ghul y la Liga de las Sombras aterrizó todo lo que se pudo haber pensado que esto se convertiría, dejando una grata impresión y dándole un gran vuelco a todo lo que habíamos visto de Batman. El camino al éxito estaba más que puesto.
Después llegó "El Caballero de la Noche", una impresionante cinta de acción sin precedentes y con un villano memorable como lo fue el Guasón, interpretado por el ya difunto Heath Ledger, quien al igual que su director, llevó su papel al límite, logrando un nivel actoral sorprendente que nos deja ver cómo Ledger dejó de ser él mismo por un tiempo para convertirse en algo vil, intempestivo y con una maldad sin igual.
Ahora, Nolan termina su ciclo con "El Caballero de la Noche Asciende", un digno final para un gran suceso cinematográfico de nuestro tiempo.
Después de los halagos, es momento de revisar todo objetivamente y hablar un poco de esta última entrega, que si bien tiene todo lo que hubiéramos podido pedir a Nolan, hay ciertos elementos que quedan a deber y que desfiguran un tanto lo que ya se había hecho en los primeros capítulos.
En esta última parte, Nolan nos presenta al incontenible Bane (Tom Hardy), un villano que no sólo desafía la destreza e inteligencia de nuestro héroe, sino su misma fuerza física, que a decir de Bane, llega a niveles nunca antes enfrentados por Wayne. Aunado a ello, la inclusión de Gatúbela (Anne Hathaway), surge como un enigma para Batman ¿aliado o enemigo? La astucia de Selina Kyle sólo se ve superada por su irresistible sensualidad.
Ahora bien, de lleno en la trama. Todo ocurre 8 años después de la segunda parte, Batman ha tirado la toalla después de años de proteger a Gótica y el daño no ha sido sólo físico, las cicatrices de tantas batallas y reconocimiento alguno le han dejado exhausto y con un gran vacío emocional.
Es así como cuando se pensaba que la ciudad había pasado por sus peores tiempos, Bane entra en escena con un plan infalible para castigar a esta sociedad que en algún momento, el mismo Ra's Al Ghul decidió hacerlo.
Bane es un hombre duro, maquiavélico y temerario. La maldad también envuelve su esencia entera pero a diferencia del Guasón, hay un objetivo distinto, Bane tiene una visión más grande, ésta le dicta que para que haya un futuro, medidas drásticas tiene que ser tomadas, el orden mundial necesita un cambio radical. Aunque ambos villanos buscaban el caos, su motivo final los hacen totallmente distintos.
He aquí un gran acierto para Nolan, la manera en que incluye a Bane a su crítica de la sociedad es sumamente interesante. El director nos expone al villano como un mal necesario para Gótica, sumida en la avaricia, en el consumismo y en la distinción social. Bane es el factor de cambio, aquél que se necesita para quitarle el poder a los que más tienen y arrancar de raíz todos los males sociales de la ciudad. Bane es el símbolo de la justicia, una que no distingue pero que castiga en vez de conciliar.
Teniendo a Batman y Bane, ambos enmascarados, nos damos cuenta de los distintos niveles que existen en su persona, nos da una mejor perspectiva de la causa del héroe. Bane, por una lado, es identificado por la misma e inmediatamente atemoriza, impone y se hace respetar; sin embargo, al mismo tiempo le recuerda del mal que lo aflige y de lo frágil que se vuelve sin ella. Batman, por el otro, usa su máscara como un símbolo también de justicia, una a los que los desprotegidos no tienen acceso. Así mismo, ésta también le recuerda sus miedos, su pasado y los frágil que se vuelve al no tenerla puesta. Batman es la vida de Bruce Wayne. Su identidad secreta es su castigo tanto como su bendición.
Gótica también juega un papel importantísimo en la historia. ¿Vale la pena salvarla? ¿Existe todavía el bien en sus entrañas? Nolan nos planeta estas y algunas otras preguntas acerca de ella. La brutalidad de sus calles es sólo un reflejo de su sociedad, desinteresada y carente de toda humildad. ¿Por qué Batman insiste en rescatarla cuando ellos no lo hacen por sí mismos? Quizá es a forma en que Wayne se salva a sí mismo, afrontando su pasado y buscando venganza en cada rincón, en cada callejón...
Cuando nos topamos con el primer enfrentamiento entre Batman y Bane, es imposible no emocionarse. Nolan logra un nivel de expectación impresionante y nos lleva al filo del asiento. Su combate contrapone el orden contra el caos, el bien contra el mal. Aunque Bane no sólo rompe su cuerpo, sino su espíritu, el director nos lleva junto a Wayne en un viaje de autodescubrimiento que lo hará levantarse de la cenizas en un pozo sin salida, en donde además de llevar su físico al límite, se habrá de dar cuenta que no importa que la causa valga la pena o no, el orden debe ser restablecido.
¿Qué es lo más impactante de la cinta? Sin duda, las secuencias de acción que Nolan nos entrega rayan en lo soberbio. Desde una peligrosa escena que involucra el desmantelamiento de un avión en pleno vuelo hasta la épica batalla final entre los seguidores de Bane con los policías de Gótica, hacen de esta tercera parte la más satisfactoria en cuanto a este factor.
Ahora, vayamos a lo que quizá más les interesa. ¿Cuáles son los puntos débiles de la cinta? Creo que lo más importantes y más notorio, es la forma en que Nolan se sale de las proporciones que él mismos e fincó al contar esta historia de Bruce Wayne. ¿Una bomba atómica? ¿La toma de una ciudad entera? Creo que Nolan pudo haber hecho mejor. Si bien los propósitos de Bane son a gran escala, amenazar volar la ciudad con una bomba atómica, nos aleja de la realidad que el director tanto pregonó durante esta época de su trilogía.
SPOILERS ADELANTE
En cuanto al desenlace de Bane, no hubo nada más decepcionante que ver a Bane morir de la manera más estúpida, y no sólo eso, sino mostrarse sumiso ante la verdadera maestra de hilos, la verdadera mente maestra de todo el plan de volar Gótica, Talia al Ghul. Su presencia en la cinta era un secreto a voces y la vuelta de tuerca cerca del final de la cinta nos impresiona poco y no aporta ningún valor. A comparación de las cintas anteriores, los villanos no se comportan a la altura de los requerimientos.
TERMINAN SPOILERS
El final; para unos, el esperado y para otros, como yo, complaciente. Nolan decidió irse por la fácil y dejar viva la chispa de El Caballero de la Noche, ya sea para bien o para mal, sólo el tiempo lo dirá.
Debo decir que Nolan y su equipo realmente pasarán a la historia por este gran fenómeno que han creado alrededor de un personaje de por sí ya legendario. ¿Queda algo a deber? Quizá no. Los fanáticos tienen la última palabra. Enhorabuena por un buen trabajo que merece el reconocimiento. Nada más.
Me encantó lo que dices del contraste de las máscaras, no lo había visto así y sin embargo es totalmente cierto.
ResponderEliminarEn cuanto a la película, creo que hay un factor que la deslinda de su predecesora y la acerca mucho a Begins. Y es obviamente, La Liga de las sombras. El gran éxito de TDK es que la amenaza del guasón es palpable, es un terrorista fuera de control con motivaciones reales y enfermas, lo cual nos pone en tensión. En TDKR la verdad una bomba atómica, o la amenaza de La Liga de las Sombras no deja de ser un algo "sacado de un cómic" y aunque entrega acción, no representa para nosotros como espectadores algo tan "real" o "factible" como el Guasón. Me parece que es mi única objeción con la cinta, sin embargo también creo que el final es directamente proporcional a la amenaza épica que se plantea de destruir Gótica.
SPOILERS: La verdad es que pensé que realmente Batman moriría, y aunque se que el estudio no dejaría a Nolan hacerlo, me parecía un experimento social bastante interesante el matar al héroe al final. Sin embargo creo que cómo público, al parecer no estamos listos para éste tipo de desenlaces en franquicias tan multimillonarias. Creo que a los últimos 8 minutos de película, le sobran únicamente 5 segundos, y son efectivamente cuando Alfred visualiza a su amo y Selina en una mesa. La incursión de Robin, el desenlace trágico, la mirada perdida de Gordon ante la estatua de Batman y todo lo demás es perfecto, pero si Nolan hubiera arriesgado, y hubiera cerrado únicamente con la toma de Alfred sonriendo, sin que nosotros sepamos que ve (y causando un millón de teorías, polémica y suspenso entre sus espectadores) me hubiera sentido realizado y creo que hubiera sido un precedente para futuras series. Al final Nolan plantea un final épico, satisfactorio, pero tampoco se sale de la raya o empuja a un nuevo límite. (Y la verdad yo no sabía lo de Talia al Ghul haha)
En fin, quedé totalmente satisfecho, porque aunque en muchas cosas no supera a TDK, es un desenlace digno de una de las mejores trilogías en la historia cinematográfica.
Me gustó tu crítica.
ResponderEliminarAhora, veo que varias personas no han quedado 100% satisfechas con la tercera parte de la franquicia, pero es que estamos acostumbrados a que cuando una saga llega a su fin, hay que echar "la casa por la ventana" y esto no es una regla de oro que garantice calidad(hay que ver el desastre que resultó Spiderman 3, donde Raimi por presiones de Sony acabó dando una película con tantas cosas que ni él no pudo abarcar, resultando una película decepcionante)
TDKR funciona y funciona bien, es el arco que cierra la historia comenzada por Batman Begins, desde el prólogo del avión en Sudamérica, que da la bienvenida a Bane, la película nos engancha en los primeros momentos.
Catwoman es magistral, luce preciosa,ágil, inteligente, tal como la Catwoman de los comics, se aprovecha de su belleza física para lograr sus objetivos. El baile entre Bruce y Selina son 2 tributos en uno: un tributo al baile entre Michael Keaton y Michelle Pfeiffer en la película Batman Returns y otro tributo es la máscara que Selina usa, muy similar al antifaz utilizado por la Catwoman de la serie de Adam West.
El traje de Catwoman se me hizo todo un acierto, un traje ajustado pero que le permite moverse rápido sin peso extra y unos lentes de espionaje, perfecto.
Bane, también es un todo un acierto, el temor y respeto que le tienen sus lacayos transmite la autoridad que este tiene, su vestuario es acertado, su voz es perfecta,y debido a que jamás vimos su boca, gran parte de la expresión del personaje se da a través de los ojos, y Nolan capturó muy bien esa idea, sus ojos siempre nos dan una idea de lo que está tramando.
La historia se desenvuelve bien, yo no le veo ningún problema al uso de la bomba que plantea Bane, así trabaja League of Shadows, toma medidas drásticas para un cambio revolucionario.
La incertidumbre del rol de Catwoman es todo un acierto, me hubiera gustado que haya tenido intereses ambientalistas como en el cómic, pero ya era mucho pedir.
Bruce Wayne también está bien desarrollado, lo siguen atormentando traumas pasados, está cansado, desilusionado, mostrando la parte más humana de Batman.
La historia se desenvuelve bien, la mancuerna hecha por Catwoman y Batman es muy buena, se atraen pero no se conocen.
Ahora, lo malo a mi punto de vista:
ResponderEliminarNolan sigue sin poder filmar escenas de lucha que se puedan disfrutar al 100%, las tomas siguen siendo torpes (no tanto como en las películas pasadas) pero es que son muy mejorables.
Me agradó cuando Bane le "rompe" la espalda a Batman, pero un gran fallo es que Batman se cura en cuestión de días, y según yo esta película no es sobre Wolverine.
El momento en el que Bane "secuestra" la ciudad es muy cuestionable, hay muchos argumentos por los cuales podemos decir que no es tan fácil tomar una ciudad (y muchos menos una en EUA).
Cuando la ciudad recibe apoyo de fuerzas especiales externas¿solamente acuden 8 personas? mal.
Cuando Gordon y sus policías están recorriendo la ciudad revisando los tanques, la recorren como si solamente fueran 4 calles, y a pie; lo mismo con Blake, llega al hospital donde Gordon estaba internado en cuestión de 3 minutos.
El momento en el que Bane está arriba del tumbler, enfrente de Blackgate, dando el discurso robado del comisionado es muy poco creíble, cuando disparan al edificio los 8 reporteros que se mueven están muy mal actuados, muy fingidos diría yo, a parte ¿no había nadie que en ese momento capturara o le disparara a Bane?
Esperaba más del regreso de Crane, que regresar como un juez con flojera.
Hay más detalles que son incongruentes, pero pasan desapercibidos, un gran acierto es que los personajes femeninos en esta película están mejor desarrollados que en TDK, en esta película la forma en que nos enteramos del villano principal es magistral y muy bien planeada, más que en Batman Begins, cuando se desvelan sus intenciones, el cambio de actuación es excelente, se nota su convicción por lograr sus objetivos, tal como Ras en la primer película.
El diálogo entre Gordon y Batman antes de subirse al Bat a llevarse la bomba, son clave, pues Batman revela su identidad y deja claro algo: Batman no es Bruce Wayne, Batman es un símbolo que puede ser cualquier persona (es la explicación de por qué Blake tomará el lugar).
El final es excelente, el uso de la pizarra mágica no pudo tener mejor aplicación que el que Bruce y Selina comiencen una nueva vida.
En definitiva TDKR es la mejor de las 3 películas, un cierre digno, villanos bien desarrollados, buena historia, la dualidad entre Batman y Bruce se recupera (cosa que se había perdido en TDK).
Y lo más importante, a diferencia de TDK, aquí sí supimos quién era el villano principal, cosa que en la película pasada jamás supimos, pensé que eso quedaría claro en esta última entrega, pero veo que seguiré con la duda.