Reseña Corona Capital 2013. (Sábado)

Un Corona Capital más ha quedado en el pasado. Tras 4 ediciones, ya tenemos más campo para poder escoger la mejor versión hasta ahora. ¿Fue acaso la gran aparición de Pixies en el 2010 lo mejor que hemos visto? ¿Es en verdad la primera presentación de Portishead EL momento del Corona Capital?¿Será que el combo Franz Ferdinand + New Order + Suede y Black Keys ha sido la mejor decisión hasta ahora? ¿O es que Queens Of The Stonge Age, Arctic Monkeys y Sigur Rós finalmente la rompieron? Difícil escoger, pero como siempre, cada quién tiene la última palabra.
Esta nueva edición del Corona nos deja con todo tipo de emociones: alegría, emoción, decpeción, sorpresa, enojo, satisfacción, etc... Eso es quizá lo que hace grandioso a una experiencia como esta, la cantidad de reacciones tan diversas que podemos encontrar. 

Está claro que un festival musical nunca podrá satisfacer por completo a sus asistentes. Para los que algunos fue algo genial, para otros pudo haber sido sumamente banal y aburrido. 

Este año, los organizadores montaron un gran cartel, sin duda uno de los más impresionantes que hayamos visto en Latinoamérica. Actos como Queens Of The Stone Age, Jake Bugg, Miles Kane y demás hacían su primera altamente esperada visita a México; mientras que otros como Arctic Monkeys, Vampire Weekend, Phoenix y The xx estaban de vuelta para compartir con nosotros el gran momento que experimentan actualmente en sus carreras.

Y así, sin más, es como se desarrollaron las actividades del Corona Capital 2013 el sábado 12 de octubre:

Quadron


Este dúo danés fue el encargado de dar al banderazo de salida. Con un pequeño pero devoto grupo de seguidores, Coco O y Robin Hannibal saltaron al escenario, acompañados de su bajista y baterista, para dar inicio al festival.

Para los que no los conozcan, Quadron despliega una propuesta sumamente fresca que incorpora elementos de soul, R&B, pop y electrónica, dando como resultado algo especialmente exquisito de apreciar. Se podrían comparar fácilmente a actos como el de Jessie Ware.

Por cerca de 40 minutos, el grupo puso a bailar sus seguidores con temas como "Favorite Star", "Crush" y "Neverland", el cual Coco dijo estaba inspirado en uno de sus más grandes ídolos, Michael Jackson.

Sin ningún tipo de apoyo visual, pero sí con mucho carisma, interactuando bastante con el público, demostrando bastante humildad y evidentemente felices de tocar en México, Coco y sus compañeros fueron unos dignísimos abridores del evento. El día comenzaba bien.

A destacar: la gracia de Coco


Palma Violets


Estos jóvenes ingleses fueron el siguiente acto de la jornada. Aunque ya gozan de cierto reconocimiento en Inglaterra, creada sobre todo gracias a la NME y a la BBC, parecía que Palma Violets apenas y tendría público a quién presentar su música; sin embargo, estaba equivocado, cientos acudieron para ver por primer vez a los originarios de Londres.

Desde que saltaron al escenario, se podía sentir cierto aire de grandeza que emanaban, en especial en el bajista, quien en todo momento procuraba mostrar su actitud "rebelde" que sinceramente no convencía a nadie.

Me cuesta creer que la BBC los haya incluido en su lista de las bandas seguir en este año. Aunque no me desagradan del todo, su música no propone nada en lo absoluto y en vivo realmente solo se dedican a cumplir con el cliché de cualquier grupo con pretensiones más allá de su talento.

Si bien el público coreaba una que otra de sus canciones, Palma Violets nunca terminó de cuajar. Resultaba extraño también ver cómo de la nada salían otro par de integrantes, o quienes sean, junto con ellos para cantar o tocar las maracas y luego volver a un costado del escenario. Claramente, de lo peor que se pudo ver en el festival.

A destacar: nada en realidad

Peace


A diferencia de Palma Violets, Peace mostró un tanto más de orden y precisión en su acto. Fue en el escenario Bizco Club donde los también ingleses presentaron casi en su totalidad su álbum debut, In Love.

El cuarteto tocó ante un nutrido grupo de fanáticos que se sabían varios de sus temas además de sus ya exitosos sencillos "Wraith" y "Lovesick".

A pesar de que su presentación fue mucho mejor que la de Palma Violets, me parece que no hay mucho espacio más para el cual Peace pueda crecer. Sí, estamos ante algo más serio que los previamente reseñados, pero al igual que ellos, es difícil encontrar algo qué resaltar o que no se haya visto antes. Habrá que esperar un segundo álbum para poder identificar cuál es el verdadero talento de la banda y hasta dónde son capaces de llegar con un poco más de producción y algunas ideas nuevas.

Lo del sábado, bien, pero para nada memorable. Solo habría que reportar una pelea que se suscitó en medio del público durante su presentación entre policías y un sujeto en evidente estado inconveniente.

A destacar: cómo la gente coreaba buena cantidad de sus temas. "Lovesick" y "Higher Than The Sun", de lo mejor.

Toy


Daba gusto ver que el nivel y la calidad de las bandas subía conforme avanzaba el día. Palma Violets y Peace realmente quedaron opacados por la presentación de sus compatriotas. Toy demostró al público mexicano porque son uno de los actos de culto más reverenciados en Inglaterra en estos momentos.

Con un shoegaze psicodélico muy bien estructurado y una actitud de respeto hacia los presentes, pero con cierto grado de indiferencia, hicieron del show de Toy uno de los más interesantes de este primer día del Corona Capital.

Conformada por 4 tipos ingleses y una tecladista española sumamente atractiva, la cual se llevó buena cantidad de halagos y chiflidos aquella tarde, la banda hipnotizó nuevamente a la carpa del Bizco Club con pura intensidad y distorsión emanada de sus instrumentos y talento.

Tom Dougall, con su apariencia andrógina y su voz llena melancolía, cautivó a los presentes desde el mismo comienzo. Sus compañeros aportaron el ruido que a veces era más fuerte que su voz, cosa que realmente no importaba, sonaba todo excelente.

No podemos evitar la obligada comparación a The Horrors, quienes son sus amigos y seguramente no han reparado en darles uno que otro consejo. Su influencia es evidente, lo cual para nada es malo; al contrario, Toy rescata cualidades de The Horrors y les agregan intensidad continua, en temas como "Left Myself Behind" y cierto romanticismo, como en "My Heart Skips A Beat".

Sin lugar a dudas, una de las grandes sorpresas del festival.

A destacar: cuando Dominic O'Diar dio un cabezazo y una patada a una pelota inflable gigante que circulaba entre el escenario y que llegó hasta él.

Travis


A continuación vino uno de los platos fuertes de la noche. Después de 4 años de ausencia, una banda muy querida por el público mexicano estaba de vuelta. Travis inundó de emoción y nostalgia al escenario Corona Light con un set repleto de éxitos y de la mejor vibra que se pudo apreciar en el festival.

Fran Healy y compañía saltaron al escenario poco antes del atardecer ante ya un grupo de miles de personas que los esperaban. Con "Mother", tema de su último álbum, Travis animó rápidamente a sus fanáticos. "Selfish Jean" y "Love Will Come Through" extendieron las emociones por unos minutos más y fue hasta después de 3 canciones que Healy por fin habló al público. Visiblemente feliz y con la humildad de siempre, el vocalista saludó y explicó que esa tarde estarían tocando tanto temas nuevos como viejos, cosa que al final resultó una mentira, pues Travis se dedicó a repasar toda su trayectoria incluyendo los viejos clásicos que han hecho llorar a todo quien los ha seguido desde hace años.

Tras "Moving" y "Where You Stand", más canciones nuevas, era momento ya de viajar al pasado y revivir viejas memorias. "Driftwood y "Closer" (no tan vieja, pero que sin duda también fue altamente ovacionada) apenas eran el comienzo. Para "Sing", Healy, con guitarra acústica en mano, llamó a sus compañeros para que cantaran con él realizando así una versión sumamente conmovedora de este tema tan representativo de la banda.

"Side" y "Turn" continuaban con el repaso y daban pie a "Flowers In The Window", otra de las canciones más coreadas por el público.

"All I Want To Do Is Rock" fue sin duda la gran sorpresa de la tarde. Gritando como nunca, Healy dejó ver que su voz continua intacta, al igual que su gran espíritu y pasión por lo que hace. Memorable fue el momento en el que Andy Dunlop, guitarrista, comenzó a subir para por los andamios para tocar el solo colgado en lo alto. Lo que pudo haber sido el gran final del show solo fue la antesala para el verdadero desenlace y uno de los instantes que más recordaremos de esta edición del Corona Capital 2013.

"Why Does It Always Rain On Me?" dio por terminada la presentación con prácticamente cada uno de los presentes entonando la letra. Como es usual en cada uno de sus conciertos, Healy preparó al público para que saltaran mientras cantaban el último coro del tema. Impresionante.

A destacar: los últimos dos temas y la gran frescura que Travis demostró en el escenario.

The xx


Después, The xx estaban listos ya para volver a presentarse ante los mexicanos a tan solo un año de su primera visita al país.

Para este nuevo show, los ingleses hicieron un perfecto balance entre sus dos álbumes tocando 8 cortes de cada uno de ellos. En esta ocasión, The xx comenzó con "Try". Las secuencias distintivas del inicio del tema prendieron al público de inmediato provocando un júbilo generalizado, el lugar estaba a reventar.

Como siempre, el trío demostró clase y finura tal y como lo han estado haciendo en el poco tiempo que lleva su carrera. Oliver y Romy volvieron a comulgar no solo con el público, sino entre ellos mismos. Su gran química contagia a los fanáticos de esa vibra que emanan cuando ambos se acercan en el escenario.

La incógnita de esta presentación sería si la banda resultaría igual de contundente en un espacio abierto. Su capacidad está más que probada en recintos pequeños y medianos, pero era hora de que nos demostraran su talento en un gran escenario. ¿Salieron avantes? Diría que sí. No cabe duda que su música llegó hasta el último de los que lo miraban lejos, muy lejos de donde ellos se encontraban. Las percusiones de Jamie XX hacían retumbar a todo mundo a una buena cantidad de metros a la distancia. Creo que no hay nada que se les pueda recriminar. Podría ser quizá la forma en que tocan algunos de sus temas, convirtiéndolos en una especie de remix en vivo, como "Crystalised", el cual nunca tocan de la forma en que lo conocemos. En fin, cuestión de gustos.

Notable es la manera en que The xx entrelaza varias canciones transformándolas en una sola. Las transiciones eran limpias y orgánicas. Esto levantaba el show en gran medida y lo hacía mucho más disfrutable. Fue en "Far Nearer" (Cover de Jamie xx) y "Sunset" donde se pudo apreciar esto de manera más clara.

Durante el set principal, "VCR" y "Islands" fueron las más coreadas. El público siempre prestaba atención. Cerca del final, con "Chained" e "Infinity", los ingleses tocaron con unos haces de luces proyectados al borde de escenario que tomaron la forma de una x gigante, buen detalle.

El combo final del encore, "Intro" + "Angels" fue igual de efectivo que en otras ocasiones. Esta última fue la que cerró su emotivo show. Muy bien por The xx.

A destacar: el encore y la relación Oliver/Mady en el escenario.

Phoenix


Los franceses comenzaron con su presentación de manera puntual y ya entrada la noche. Con su pantalla en rojo, los teclados comenzaron a sonar dejando ver de inmediato que"Entertainment" sería la encargada de abrir su set. Gracias a la batería a cargo de Thomas Hedlund, este y la mayoría de los temas de Phoenix alcanzan un nuevo nivel de intensidad que resulta sumamente beneficioso para todo su espectáculo.

"Lasso" y Lisztomania", de su exitoso Wolfgang Amadeus Phoenix, siguieron a continuación. Con el público cantando sin cesar de a lado de Mars, no pudo haber habido mejor comienzo.

Fue realmente gratificante poder escuchar más de un tema de su genial álbum It's Never Been Like That. Además de la siempre presente "Long Distance Call", Phoenix nos regaló "Rally" y "Consolation Prizes", un par de grandiosas sorpresas.

Como lo han venido haciendo en la gira del Bankrupt!, la banda mezcló varios de sus temas en una sola gran canción. La fusión más espectacular resulta de la del tema "Bankrupt! con "Love Is Like A Sunset", (Sunskrupt!) en donde la intensidad de vuelve a hacer presente a un nivel realmente alucinante. Instrumental en su mayoría, salvo las breves líneas que Mars recita, pertenecientes al segundo tema, esta interpretación resulta de los mejores momentos en cada concierto de Phoenix.

En distintas ocasiones, Mars bajó con el público poniéndose justo en la valla de contención para poder sentir a los suyos de cerca. Casi al final, este también pidió a todos los presentes que les cantaran a él y sus compañeros una canción que habían escuchado más temprano en el día. Rápidamente, los fanáticos se dieron cuenta de cuál se trataba y le cantaron un par de versos del "Cielito Lindo".

Además de lo bien que tocaron, hay qué destacar los visuales que Phoenix utiliza en sus conciertos, de los mejores que se pudieron apreciar en el festival. Simples, basándose en colores llamativos, animaciones sencillas y timelapses de varios puntos representativos de su Paris natal, estos crean una atmósfera sin igual y son los acompañantes perfectos para cada unos de los temas.

Aunque "1901" cerró el set principal, fue "Rome" la que terminó con broche de oro toda su interpretación, sin mencionar claro que Mars terminó subido en los andamios.

Tras Phoenix, el día casi llegaba a su fin.

A destacar: "Sunskrupt!" y lo hermoso de sus visuales.

Blondie


La carpa del Bizco Club apenas y pudo soportar a toda la gente que se dio cita para poder ver al acto
que cerraría las actividades de la primera jornada. Blondie apareció a la medianoche finalmente para revivir lo mejor de una época que ya se fue.

Por supuesto, Debbie Harry fue el centro de atención en todo momento. Cambiando de vestuario en distintas ocasiones, entre los que destacaba un extraño atuendo como de bruja, la cantante no dudo en derrochar sensualidad como si estuviéramos todavía en plena década de los 80.

Los primeros acordes de "One Way Or Another" enloquecieron al público desde el primer minuto de su presentación. Al igual que Travis, Harry dijo que estarían tocando viejos y nuevos temas, pero la noche terminó convertida también en un repaso de los más grandes éxitos de Blondie. "Atomic", "The Tide Is High", "Rapture" (la cual tuvo un extracto de "(You Gotta) Fight For Your Right (To Party), de Beastie Boys), "Heart Of Glass" y "Call Me" significaron el triunfo total de su show de poco más de una hora.

Extraña era la manera en que el baterista estaba aislado de los demás integrantes debido a una mampara transparente que cubría todo su instrumento.

Con miembros clásicos y nuevos entre su alineación, Blondie demostró que siguen más vivos que nunca; y Harry, que siempre será toda una reina.

A destacar: el impactante inicio con "One Way Or Another".

Aquí la segunda parte de la reseña de la Corona Capital 2013.

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