¿El resultado? Una de las cintas más decepcionantes y aburridas del año. Y no digo esto porque se trate de un musical en sí, que aunque es uno de los géneros más arriesgados en el cine, "Los Miserables" falla a tantos niveles que es imposible no sentirse incómodo e insatisfecho por lo que vemos en pantalla.
¿Por dónde empezar? Cuesta trabajo creer cómo Hooper ha dejado de hacer tanto después de haberlo entregado todo en su anterior trabajo. Aplaudo que el realizador se haya embarcado en un proyecto de estas proporciones, parecía que su experiencia sería suficiente, pero al ver la manera tan plana en que este ha plasmado una obra fascinante, no queda más que culparlo por dejar tantos aspectos a la deriva.
Veamos. Al encontrarnos ante un musical, sabemos a qué nos atendremos durante un rato frente a la pantalla. La interpretación de cada uno de los actores y la ambientación en la que cada uno de los números se desenvuelve es buena a decir verdad, el problema yace en esos pequeños lapsos en donde tenemos las escasas líneas de los personajes. Se ven tan forzados, tan fuera de lugar y tan llenos de una apatía que contagia sin piedad. Aunque son pocos estos momentos, son suficientes para cortar de tajo del ritmo de la película y dejarnos sufrir por un largo rato.
La manera en que el CGI y los sets se han mezclado, resulta realmente desastrosa. No me refiero a que carezca de calidad, pero al hecho de que la forma en la que el equipo de Hooper inserta a los personajes y sus alrededores en un París generado a computadora, podrá parecer impresionante pero al pensarlo bien, es obvio cómo Hooper busca generar grandilocuencia y espectacularidad a través de imágenes que lo tienen todo menos significado. Todo esto termina por afectar a la ambientación de la historia.
Después tenemos los sets. Aunque hay buena decoración en general y un arte aceptable, existen momentos en los que estos realmente parecen eso, sets y nada más. La sensación de que hay algo más alrededor de los estudiantes rebeldes es nula. El encierro es evidente y no sólo nos hace sentir incómodos y poco impresionados, sino totalmente decepcionados y ávidos que el martirio termine.
A pesar de todo esto, "Los Miserables" tiene sus momentos, todos ellos cortesía de Jackman y Hathaway, quienes seguramente ya han asegurado al menos un Óscar, pues sus interpretaciones verdaderamente se roban toda la atención, principalmente Hathaway, quien con un papel que está presente en menos de la mitad de la película, le basta para impactar y comulgar con el espectador en el momento en que su dignidad ha sido aplastada hasta lo más bajo. Por el otro lado, ya era de todos sabido que Jackman podía cantar y adecuarse a este tipo de producciones, pero es de destacar cómo el actor se lleva a sus hombres todo el peso de la cinta por al menos 3/4 de esta y logrando una empatía singular desde el mismo comienzo.
El único acierto que puedo dar a Hooper, además de las actuaciones de Hathaway y Jackman, son algunos planos excelsos que el director nos regala en algunos momentos de la cinta y que nos recuerdan inmediatamente su anterior obra. Esas tomas en donde apenas tenemos un vistazo de los personajes, dejando un aire inquietante en la mayoría de la toma, nos hacen pensar en cuadros impresionistas y la situación tan delicada a la que se enfrentan los personajes. Lástima que esta sea lo único positivo que pueda sacar del trabajo de Hooper en esta ocasión.
Sí, la cinta está nominada a varios premios de la Academia a entregarse en las próximas semanas. Seguramente veremos a Hathaway llevarse uno a casa y quizá otro más por el maquillaje o vestuarios pero si somos objetivos, sabremos que "Los Miserables" es la cinta más débil de las 9 contendientes para el gran premio de la noche. Veremos cómo le va.
Veamos. Al encontrarnos ante un musical, sabemos a qué nos atendremos durante un rato frente a la pantalla. La interpretación de cada uno de los actores y la ambientación en la que cada uno de los números se desenvuelve es buena a decir verdad, el problema yace en esos pequeños lapsos en donde tenemos las escasas líneas de los personajes. Se ven tan forzados, tan fuera de lugar y tan llenos de una apatía que contagia sin piedad. Aunque son pocos estos momentos, son suficientes para cortar de tajo del ritmo de la película y dejarnos sufrir por un largo rato.
La manera en que el CGI y los sets se han mezclado, resulta realmente desastrosa. No me refiero a que carezca de calidad, pero al hecho de que la forma en la que el equipo de Hooper inserta a los personajes y sus alrededores en un París generado a computadora, podrá parecer impresionante pero al pensarlo bien, es obvio cómo Hooper busca generar grandilocuencia y espectacularidad a través de imágenes que lo tienen todo menos significado. Todo esto termina por afectar a la ambientación de la historia.
A pesar de todo esto, "Los Miserables" tiene sus momentos, todos ellos cortesía de Jackman y Hathaway, quienes seguramente ya han asegurado al menos un Óscar, pues sus interpretaciones verdaderamente se roban toda la atención, principalmente Hathaway, quien con un papel que está presente en menos de la mitad de la película, le basta para impactar y comulgar con el espectador en el momento en que su dignidad ha sido aplastada hasta lo más bajo. Por el otro lado, ya era de todos sabido que Jackman podía cantar y adecuarse a este tipo de producciones, pero es de destacar cómo el actor se lleva a sus hombres todo el peso de la cinta por al menos 3/4 de esta y logrando una empatía singular desde el mismo comienzo.
El único acierto que puedo dar a Hooper, además de las actuaciones de Hathaway y Jackman, son algunos planos excelsos que el director nos regala en algunos momentos de la cinta y que nos recuerdan inmediatamente su anterior obra. Esas tomas en donde apenas tenemos un vistazo de los personajes, dejando un aire inquietante en la mayoría de la toma, nos hacen pensar en cuadros impresionistas y la situación tan delicada a la que se enfrentan los personajes. Lástima que esta sea lo único positivo que pueda sacar del trabajo de Hooper en esta ocasión.
Sí, la cinta está nominada a varios premios de la Academia a entregarse en las próximas semanas. Seguramente veremos a Hathaway llevarse uno a casa y quizá otro más por el maquillaje o vestuarios pero si somos objetivos, sabremos que "Los Miserables" es la cinta más débil de las 9 contendientes para el gran premio de la noche. Veremos cómo le va.
Gran puesta en escena y decoración y medios y también buenas canciones para que todo en 'Los Miserables' acabe sonando huero, vacío, hueco.... Una lástima. Un saludo!
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